Dentro del juego del mercado eléctrico hay varios jugadores. Los principales son las comercializadoras y las distribuidoras. Éstas pueden coincidir pero no tiene por qué.
Por un lado, la distribuidora es quien se encarga de llevar la electricidad en Baja Tensión a una zona determinada. Estas compañías son las propietarias de la red, de nuestra instalación y, en muchas ocasiones, del contador.
Estas compañías son responsables de:
– Mantenimiento de las redes de Media y Baja Tensión
– Garantizar la calidad del suministro eléctrico
-Solucionar averías
-Mantenimiento de los equipos de medida, como contadores y maxímetros
– Encargarse de las lecturas de los contadores y entregársela a la comercializadora de cada uno de los usuarios
– Realizar altas y bajas de suministros, cambios de titular y cambios de potencia o tarifa a petición del cliente, que a su vez lo solicita a la comercializadora.
Frente al gran número de comercializadoras, tan solo existen 5 grandes distribuidoras:
– Endesa Distribución
– Iberdrola Distribución
– Unión Fenosa Distribución
– Hidrocantábrico Distribución
– E.On Distribución
Estas cinco distribuidoras se encargan de suministrar la energía por zonas:
Es probable que muchos de estos nombres os suenen de algo y es que en muchas ocasiones las propias distribuidoras tienen sus propias comercializadoras que se encargan de llevar la energía a los hogares y empresas.
Por otro lado, las comercializadoras son las encargadas de:
– Comprar la electricidad en el mercado mayorista
– Suministrar la electricidad a los clientes
– Las comercializadoras que trabajan en el mercado libre se encargan también de fijar las tarifas eléctricas